Cuando pienses que tu enfermedad es profesional, no te quedes con el no.
1) Solicita volante para la Mutua.
2) Si no te lo dan o la Mutua se lava las manos, pide a tu médico de cabecera el impreso para Salut Laboral (así es en Catalunya), en otras comunidades ver cual es el organismo que se dedica a hacer el seguimiento de enfermedades profesionales.
3) Solicita valoración de Contingencia en el ICAM (averiguar en las otras comunidades cual es el equivalente al Institut Català d'Avaluacions Mèdiques.
4) Si el ICAM dictamina enfermedad común, como en mi caso al inicio, porque no está reconocida tu afección dentro de las habituales en tu profesión(*), reclama, puedes pedir revisión.
5) Es muy importante el período de observación de tu dolencia, ya que si mientras estas de baja, el daño desaparece o mengua, y Treball al CAP (Salut Laboral de la Generalitat) lo verifica, está claro que es fruto de tu trabajo...como me sucedió a mí.(*) Mi trabajo es teleoperadora, pero las funciones realizadas no eran las que se asocian en el imaginario colectivo con una teleoperadora (con cascos y hablando todo el tiempo), sino que se asimilaban más a un grabador de datos, copia y pega todo el tiempo, dado que estaba toda la jornada imprimiendo contratos. De aquí cabe deducir el peligro añadido de realizar funciones que no son de la categoría, puesto que luego no reconocen fácilmente que lo que te pase sea profesional, ya que estabas haciendo lo que no corresponde con el listado de enfermedades profesionales de tu sector.
